Por no limpiar la plancha en muchas ocasiones te encuentras con manchas inesperadas en las prendas de ropa tras haberlas lavado y planchado. Esto suele ser debido a que la plancha es el electrodoméstico que menos se limpia, seguramente por la falta de conocimiento para hacerlo de forma correcta.
Es tan importante conocer cómo se ha de limpiar como tener un mantenimiento adecuado tras cada uso, de esta forma evitarás que se pueda estropear o que tus prendas favoritas desaparezcan.
Es tan importante conocer cómo se ha de limpiar como tener un mantenimiento adecuado tras cada uso Share on XMantenimiento habitual de una plancha
– Para llenar el depósito de las planchas de vapor, lo más recomendable es utilizar agua destilada, hervida o descongelada. Tienes que evitar utilizar agua del grifo.
– Cuando planchas la ropa con vapor debes saber que cada prenda requiere de una temperatura adecuada y que, si no se respeta, pueden aparecer manchas en la base de la plancha que se pueden transferir a la ropa.
– Si descubres una mancha de almidón en la base de la plancha, frótala con aceite de oliva mientras la plancha está caliente.
– Tras cada uso puedes pasarle un trapo húmedo para evitar la acumulación de manchas entre planchados.
¿Cómo limpiar la plancha?
Seguramente sabrás que los ingredientes principales para limpiar una plancha de forma efectiva y económica son el bicarbonato de sodio y el vinagre.
Debes tomar dos precauciones antes de comenzar a limpiar la plancha, la primera es que se enfríe y la segunda que no esté enchufada. Humedece un paño con una mezcla de vinagre y agua en las mismas proporciones y añade una pizca de bicarbonato sódico. Utiliza un paño impregnado realizado círculos para eliminar las manchas de forma más sencilla.
También puedes utilizar otra alternativa, y para ella necesitarás sal y papel encerado. Esparce la sal sobre el papel y pasa la plancha fría para que la suciedad se quede adherida a la sal. Posteriormente utiliza un abrillantador para metales, pasándolo suavemente por la superficie.
Si lo que quieres es hacer una limpieza profunda, también debes limpiar su interior. Para ello toma la solución inicial para limpiar el exterior y colócala en el depósito de la plancha. Enchúfala y una vez caliente, utiliza el vaporizador para que se limpien los orificios y evitar la acumulación de sarro en los conductos.
¿Cómo limpiar una plancha de vapor?
El rendimiento de una plancha de vapor es verdaderamente espectacular, aunque te pueda sorprender. Para que el planchado sea tan sencillo como bueno, debes realizar una limpieza a este electrodoméstico cada poco tiempo.
Para limpiar una plancha de vapor tan solo necesitarás un par de toallas viejas, sal, una rejilla del horno, papel encerado, vinagre, papel de periódico y agua destilada.
Es fundamental limpiar el depósito del agua de forma regular, porque esta suele dejar sedimentos en el fondo de la plancha.
Para realizar un limpieza completa necesitarás llenar el depósito de agua con vinagre blanco, ya que es un elemento de limpieza básico. Seguidamente, coloca una de las toallas viejas sobre la rejilla y coloca la plancha sobre la toalla en posición de planchado. Evita que se queme la toalla mientras procedes a realizar la limpieza.
Deja que la plancha se caliente y enciende el vaporizador para que el vapor del vinagre remueva todos los sedimentos y residuos de los orificios y vías de tu electrodoméstico.
Cuando el vinagre se haya agotado, es conveniente eliminar cualquier resto que pueda quedar. Para ello, rellena el depósito con agua destilada, calienta y repite el proceso anterior; de esta forma habrás limpiado todos los conductos del aparato.
¿Cómo limpiar el fondo de la plancha a vapor?
Para limpiar la placa metálica debes esperar a que esté completamente fría. Quita la rejilla y coloca sobre la toalla unas hojas de periódico. Coloca sal sobre estas y pasa la plancha varias veces hasta que veas que los residuos minerales y el sarro del anterior proceso han desaparecido.
Si el fondo del electrodoméstico tiene manchas oscuras, calienta vinagre, disuelve una cucharada de sal de mesa, humedece un paño limpio y procede a limpiar la superficie hasta que las manchas desaparezcan.
¿Cómo limpiar la plancha de ropa?
Uno de los accidentes más recurrentes tanto en principiantes como en personas que llevan planchando muchos años sucede cuando planchas por error, o por desconocimiento, una pieza de encaje, lycra, tul o una camiseta serigrafiada.
El plástico, al contactar con el calor, se derrite rápidamente y se impregna en la suela de la plancha. Si esto te llegase a suceder, deja de planchar y apaga el aparato, ya que si continúas haciéndolo mancharás el resto de prendas.
Si intentas eliminar los restos del fondo metálico con un estropajo, rayarás la superficie y seguramente consigas que quede inservible, ya que se pegará a todas las telas que pretendas planchar.
Los productos multiusos abrasivos o los detergentes dañarán la capa protectora del suelo de la plancha, por lo que para eliminar adecuadamente los restos puedes aprovechar el calor del electrodoméstico y los siguientes elementos que seguramente tendrás en casa para limpiarla adecuadamente.
Necesitarás papel de estraza y una vela. Desenchufa la plancha y espera a que se temple. Si estuviese fría, caliéntala hasta una temperatura media y luego desenchúfala. Frota la vela contra la zona que se ha quemado y plancha sobre el papel, verás como desparecen los restos de cera con la mancha.
Si no dispones de estos elementos, puedes utilizar sal fina o de mesa sobre papel de aluminio y planchar sobre ella. Los granos de sal despegarán los restos quemados de la plancha, esta debe estar ligeramente caliente. Aunque la superficie de la plancha sea antiadherente no te preocupes, que no se rayará con el uso de la sal.
Si las manchas no son muy grandes, puedes aplicar un trapo limpio impregnado con vinagre blanco sobre el suelo. Esta solución es muy útil cuando los restos de tela están atrapados en los orificios de salida del vapor.
Otra opción es elaborar una especie de pasta mezclando vinagre y sal en las mismas proporciones y aplicarla en la suela de la plancha intentando escurrirla al máximo para que no gotee. Déjala actuar durante unos minutos y cuando se comience a secar, utiliza la misma esponja con la que la has aplicado y frota el metal con mucha suavidad, para que la sal arrastre la suciedad. Una vez desincrustado, elimina los restos con un trapo o una bayeta hasta que la superficie quede limpia totalmente.
Independientemente de por cuál de las opciones que te hayas decantado, el último paso que debes realizar para garantizar que no quedarán restos en el aparato es limpiar la base de la plancha con un trapo suave y una mezcla de agua con jabón neutro. Con esto, tu plancha quedará como nueva.
¿Cómo limpiar una plancha quemada?
Cuando la superficie de tu plancha está quemada no la utilices antes de limpiarla porque arruinarás cualquier prenda que quieras planchar.
Para que tus prendas no se estropeen, puedes limpiar la superficie de la plancha con productos que de forma habitual sueles tener en casa.
– Sal: esparce sobre un paño seco varias cucharadas de sal de mesa. Enciende el aparato y espera a que coja temperatura. Seguidamente, frota hacia delante y hacia atrás hasta que desaparezcan por completo las marcas de quemaduras. Apaga la plancha y una vez que se haya enfriado limpia la base con un paño húmedo. Ya la tienes de nuevo lista para su uso.
– Vinagre: esta es la solución que deberás utilizar si las marcas son un poco más resistentes. Calienta un poco de vinagre blanco e impregna un paño limpio, posteriormente frota la base quemada de tu aparato eléctrico. Si, a pesar de realizar esta limpieza, las manchas persisten, añade sal o bicarbonato sódico al vinagre caliente y repite el proceso. Una vez limpia la plancha, pásale un trapo seco antes de guardarla.
– Detergente de ropa: si la superficie de tu plancha es antiadherente, puedes utilizar detergente de ropa para limpiarla. Calienta agua y añade unas gotas del detergente habitual. Sumerge un trapo en la mezcla y limpia la plancha. Así de sencillo.
– Jabón para lavar la vajilla: si las marcas llegan hasta la abertura de la plancha, mezcla agua con jabón para lavavajillas e introduce un hisopo. Pásalo por las aberturas de la plancha y tendrás el problema resuelto.
– Velas: enciende la plancha y, una vez que haya adquirido temperatura, pasa cualquier tipo de vela que tengas por casa sobre la superficie. Retira la cera con un trapo limpio y listo. Este remedio suele funcionar muy bien.
– Pulidor de metales: si la base de la plancha no está recubierta, puedes utilizar un pulidor de metales para retirar las marcas de las quemaduras. Frota con un paño el pulidor sobre ellas y cuando ya hayan desaparecido, limpia el aparato con un trapo limpio.
Conclusión
La correcta limpieza de la plancha te va a ayudar, tanto a mantener la ropa completamente limpia después del proceso de planchado, como a que tu electrodoméstico dure más tiempo en condiciones óptimas para su uso. Es algo que no requiere demasiado tiempo y te puede ahorrar muchas inconveniencias.