Aunque planchar parezca una tarea sencilla, lo cierto es que no todas las prendas están hechas con el mismo material, y por lo tanto, cada una presenta sus particularidades a la hora de plancharlas: temperatura, humedad, riesgo de brillos, etc. Por ejemplo, planchar una camisa y que quede impecable dependerá de varios factores.
En este post queremos mostrarte la forma correcta de planchar tus prendas de poliéster, para cuidarlas óptimamente y evitar que te lleves algún susto innecesario, como una quemadura sobre la tela. Las prendas de este material son muy similares a las de algodón, con la diferencia de que este es una fibra natural y el poliéster es sintética.
Consejos para planchar prendas de poliéster en planchas y centros de planchado
1. La temperatura debe ser baja. Podemos encontrar prendas realizadas con polimezclas o con poliéster textil, que se caracterizan por no soportar temperaturas altas. Programa la temperatura de la plancha para que no sea muy alta y, si la tuya incluye la opción de plancha para prendas de algodón, no la escojas, dado que el algodón soporta temperaturas mayores y puede que este material no resista tanto calor.
Determinadas planchas te permiten ajustar la temperatura para conseguir el resultado óptimo y, así, evitar que planchemos con más o menos calor del adecuado para cada prenda. Recuerda que la plancha suele tardar un poco en cambiar de temperatura, por lo que presta atención a la señal que indique que se ha conseguido la temperatura deseada. Es decir, que si disminuyes la temperatura, debes esperar a que la luz indicadora te muestre el cambio.
2. Separa las partes de la prenda. Se recomienda separar la parte trasera y delantera de la prenda con la ayuda de la tabla de planchar. Utilizar una tabla acolchada evitará la aparición de brillos y marcas.
3. Comienza por la zona más baja. Empezar por la zona inferior e ir avanzado con la punta hacia la zona superior de la prenda te aportará resultados más idóneos. No coloques la punta de la plancha hacia abajo y por detrás, sino que es preferible hacerlo hacia el frente y avanzar de forma horizontal.
4. No dejes de mover la plancha. Recuerda no dejar posada la plancha más del tiempo necesario para quitar la arruga, ya que se puede quemar. Realiza movimientos siempre en el mismo sentido; es decir, o bien de arriba abajo o de izquierda a derecha, para evitar que se formen nuevas arrugas.
5. Pulveriza agua sobre la prenda. La mayoría de planchas disponen del botón que pulveriza el vapor mientras se realiza el planchado, lo cual nos ayuda a hacer el trabajo más fácil.
6. Siempre que sea posible, plancha con la ropa del revés. Dado que el poliéster es un material que no resiste a altas temperaturas, es preferible realizar el planchado con la prenda vuelta. Así conseguirás que la tela tenga una mayor resistencia al calor aplicado.
7. Escoge una plancha adecuada. Dado que el poliéster es capaz de combinarse con otros materiales como el algodón, la lana o el nylon, debemos tener en cuenta esto a la hora de planchar prendas que tengan los diferentes materiales. Si consideras dificultoso planchar ciertas prendas, los centros de planchado te facilitan el trabajo para conseguir que tu ropa quede perfecta en menor tiempo.
Puedes encontrar la plancha más adecuada a precios más que razonables. Son aconsejables las planchas eléctricas de vapor, que como hemos mencionado anteriormente pueden ayudarnos a realizar el trabajo de forma más eficaz y rápida. La plancha debe tener varias opciones de calor y diferentes niveles hasta llegar a los 2200 W.
8. Organizar tus prendas para evitar equivocaciones. Es probable que si planchas varias cosas a la vez, tengas mayor probabilidad de equivocarte en la temperatura. Te aconsejamos que separes las prendas por su material; o sea, primero separa aquellas que sean de materiales que necesiten una baja temperatura para el planchado, como es el caso del poliéster. Posteriormente plancha aquellas que necesiten una mayor temperatura. De esta forma no tendrás que esperar a que la plancha se enfríe si estás usándola a una mayor temperatura de la deseada. Y, lo más importante, evitarás equivocarte y utilizar más calor del necesario.
9. Utiliza paños o trapos para evitar quemaduras. En las zonas más delicadas de las prendas, o en aquellas que contengan materiales más delicados, utiliza un paño y colócalo sobre la ropa a la hora de planchar. Es igual de eficaz que planchar directamente sobre la ropa y no correrás el riesgo de que sufra quemaduras o daños.
10. Cuidado con los botones, bordados y cremalleras. Pueden interferir en el planchado correcto y que queden algunas arrugas, por lo que ten cuidado a la hora de plancharlos. Intenta que el calor llegue a las zonas más próximas de estos complementos pero sin llegar a pasar el metal de la plancha sobre ellos.
11. Mantén la plancha limpia. Si la utilizas estando sucia, es probable que luego esa suciedad quede impregnada en la ropa, por lo que se recomienda que se mantenga limpia la superficie. Puedes encontrar líquidos y productos especiales para la limpieza de las planchas. Por otro lado, mantén los depósitos de vapor libre de cal, ya que esta puede acumularse y producir manchas marrones.
12. Si por alguna razón se funde el tejido, limpia la superficie y no dejes que se enfríe. Si se funde el tejido y se enfría, es posible que quede impregnado y se endurezca, por eso es mejor aumentar la temperatura del aparato para poder retirarlo con papel y limpiarlo mientras esté encendido y caliente.
Recuerda seguir las instrucciones que vienen en el etiquetado de las prendas a la hora de planchar una camisa, una falda u otra prenda para evitar quemaduras o cualquier tipo de problemas. Sigue esta serie de consejos para conseguir el mejor resultado en tejidos como el poliéster. Esperamos que te hayan servido de ayuda y que obtengas resultados óptimos en tus prendas con esta relación de trucos y consejos.
Qué hacer cuando el vapor o agua deja un cerco en la prenda de poliéster?